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Nuevas tecnologías predictivas para la Minería

La empresa Micomo, fruto de una alianza entre la estatal Codelco y la nipona NTT (2006) y que posteriormente fue adquirida por Fundación Chile (2012), adaptó el sistema BOTDR (Brillouin Optical Time Domain Reflectometry) para la industria minera y energética, que permite monitorear el estado de la correa transportadora, detectando con precisión cambios de temperatura y deformaciones (hasta distancias de más de 50 km), gracias a la instalación de una fibra óptica que es estimulada con impulsos láser.

La operación continua de la correa genera un desgaste, comenta Franz  Strube, Gerente Comercial de Micomo, haciendo que el polín friccione con la correa y se sobrecaliente, “con el riesgo de que ésta se corte o se incendie”. Con la instalación de la fibra óptica a una distancia cercana al polín, es posible registrar los cambios de temperatura y con una frecuencia de minutos, información vital que luego es enviada a la minera en línea y de forma remota.

La entrega de los datos es proporcionada mediante una plataforma web de visualización, donde el operario ingresa con su nombre de usuario y password, o bien, mediante reportes escritos que incluye gráficos y recomendaciones, los cuales son enviados directamente al jefe de operaciones. 

El BOTDR además es capaz de identificar alteraciones como compresiones, estiramientos, deformaciones y cambios de temperatura en taludes, relaves y chancadores. En este caso, la fibra óptica arroja una imagen en 3D que revela la profundidad y longitud de la deformación, lo que permite trazar una línea de tiempo con la evolución del daño y tomar acciones preventivas.

Actualmente, la industria utiliza radares para inspeccionar la condición de los taludes, cuenta Strube, pero éstos sólo monitorean superficialmente la estructura. “Como nuestra tecnología (fibra óptica) va inserta dentro del talud, podemos anticipar cualquier tipo de cambio, ahorrándole a la minera US$1 millón al día en caso de que colapse un talud y US$200 mil al día si se corta una correa transportadora”.

“Contar con  un sistema que permita a la compañía minera detectar con antelación posibles colapsos, debería ser una herramienta que se exija a toda la industria”, sentencia  Enrique Molina, Director de Innovación en Minería de Fundación Chile, “ya que accidentes como el de los 33 mineros pudo haberse evitado con el uso de esta tecnología”.

Si bien la fibra óptica ya ha sido aplicada en el metro de Tokio, a objeto de verificar el estado de los túneles, es primera vez que ésta es utilizada en minería, dice Strube.

Gracias a esta propuesta, que incluye la instalación de la tecnología, puesta en marcha, servicio de mantención y monitoreo en línea (US$350 mil al año), Micomo ya ha cautivado a varios jugadores de la escena nacional e internacional, entre los que destacan Codelco, Tinguiriquica Energía, Vale, Antamina Perú y la sueca Nordic Iron.

Pero, dicho modelo de negocios cambia dependiendo de las necesidades de cada cliente. Por ejemplo, grafica Strube, Vale solicitó la implementación de la tecnología para el monitoreo de taludes, “pero ella misma quiso hacer el monitoreo en línea, por lo que capacitar a los operarios  brasileños en la lectura de los datos fue una opción”. 

Y en el caso de Nordic Iron, Micomo tuvo que mojar un poco más la camiseta. Ello debido a que la minera sueca está desarrollando un megaproyecto para explotar una mina de hierro en la localidad Blötberget. Se trata de un yacimiento subterráneo de más de 100 años que hoy se encuentra inundado y rodeado de varias casas. 

El objetivo de la sueca es drenar el agua de la mina antes de iniciar la explotación, sin causar perjuicios a la comunidad colindante, lo que obligó al equipo de ingenieros físicos de la firma chilena a trasladarse hasta el lugar. Allí trabajó junto a la empresa de ingeniería Ramböll (a cargo del proyecto de Nordic Iron), quien facilitó los planos geomecánicos y lo que permitió diseñar la ingeniería para determinar los puntos en los que debía ser instalada la fibra óptica.

“Todavía no llegamos a la etapa del monitoreo en línea y esperamos poder hacerlo desde Chile”, concluye Strube.

Fuente: Direcmin